¿Qué Somos?

Somos una familia bendecida por Dios. Unidad y ungida en su Amor. Guiados por su propósito en el evangelio de Jesús; con la finalidad de ayudar a los demás a descubrir su gran potencial de poder lograr con la ayudad de Dios y fe en su palabra; desarrollar la semejanza con que Dios nos creó, apartándonos de los males y las vanidades de este mundo. Nuestra misión es que alcances una verdadera vida de devoción y de relación con Dios, al cuidado de sus mandamientos, el estudio de su palabra y la constante oración. Donde descubrieras que somos todos mayordomos de su amor y que en esto está el propósito de nuestra existencia; donde encontraremos nuestra verdad de vida, agradando a Dios y viviendo con su propósito; más elevado y verdadero.

domingo, 14 de julio de 2013

JESÚS ‘evangelio’


JESÚS
‘evangelio’

Señor guíanos con bien…
De en medio, de toda esta oscuridad.

Bienaventurados somos; pues aún podemos en este mismo instante, depositar nuestras vidas en las manos de nuestro amado Dios; gloria y loores a su nombre. Que toda palabra que hoy escriba sea recibida con sabiduría y llene de bendiciones las vidas de todos los que leen. En el nombre poderoso de Jesús, amén.

Reciban todos con agrado, estas palabras que hoy trae la voluntad de Dios a todos; pues son todas palabras de los profetas y nuestro maestro Jesús. De quien nos hablan las escrituras y por quien todos debemos seguir en la lucha y esforzándonos por lograr alcanzar; con y en cada uno de nuestros actos, reflejando su amor, nuestra devoción y su presencia en nuestras vidas.

Leemos que fue escrito:
Eliseo le dijo a Giezi:
¿De dónde vienes, Giezi?

Y él dijo:
Tu siervo no ha ido a ninguna parte.

El entonces le dijo:
¿No estaba también allí mi corazón, cuando el hombre volvió de su carro a recibirte?
¿Es tiempo de tomar plata, y de tomar vestidos, olivares, viñas, ovejas, bueyes, siervos y siervas?

Por tanto, la lepra de Naamán se te pegará a ti y a tu descendencia para siempre.

Y salió de delante de él leproso…
Blanco como la nieve.
‘2da de Reyes 5:25b-5:27’

Así pues, vemos como la avaricia de muchos en este tiempo, donde las personas ya no buscan de Dios, sino de sus beneficios; Dejan de mirar la finalidad del evangelio dado por Jesús, para correr como Giezi en busca de recompensa por las bendiciones que Dios pudiera estar dando; no por medio a ellos, sino a la fe que les puedan inspirar. Para cumplir con dolor las palabras dadas por Jesús; quien dijese:

Todo árbol que no da buen fruto…
Es cortado y echado en el fuego.

Así que, por sus frutos los conoceréis.
(Tanto a los verdaderos Cristianos como a los Anatemas)

No todo el que me dice:
Señor, Señor, entrará en el reino de los cielos, sino el que hace la voluntad de mi Padre que está en los cielos.

Muchos me dirán en aquel día:
Señor, Señor…
¿No profetizamos en tu nombre, y en tu nombre echamos fuera demonios, y en tu nombre hicimos muchos milagros? (Ojo: en esto trabaja la fe de quienes son bendecidos, muchas veces más de las que son intercesores)

Y entonces les declararé:
Nunca os conocí; apartaos de mí, hacedores de maldad.
‘Mateo 7:19-23’

El poder de Dios está en la fe que depositamos en su palabra, y es manifestada por medio al espíritu. Donde muchos lograran ver cumplir sus peticiones, porque creen en las oraciones de sus pastores; sin duda muchas de ellas con la fuerza para hacer realidad sus peticiones; pero que muchas de las veces son su propia fe actuando; pues aprendieron a creer en otros, antes que en Dios y lo que puede hacer, si tenemos la fe necesaria y le pedimos creyendo.

Vemos también que luego de que Abraham viviere en tierra de los filisteos por muchos días; Dios fue y probó su fe y Leemos que fue escrito:
Aconteció después de estas cosas, que probó Dios a Abraham, y le dijo:
Abraham.

Y él respondió:
Heme aquí.

Y dijo Dios:
Toma ahora tu hijo, tu único, Isaac, a quien amas, y vete a tierra de Moriah, y ofrécelo allí en holocausto sobre uno de los montes que yo te diré.
‘Génesis 22:1-2’

Abrahán no dudo y fue e hiso como le fue pedido; pero no concluyo en muerte, sino en vida. Pues Dios le estaba probando; y su determinación en cumplir, su obediencia trajeron, no solo resultados, sino frutos espirituales, frutos de consciencia, frutos de vida y agrado a Dios.

Hace unos días, en una publicación escribí:
El evangelio de Jesús, es el hombre: desprendido, empático, lleno de amor y con tiempo para todos los demás, dando lo que pudiera darles; amando a los demás al punto de dar todo, aun sin creer que merezcan tanto amor, en esta manera estamos dándonos por completos a Dios.

Evangelio de Jesús…
Si creemos y lo guardamos es igual:
Al hombre y la mujer que Dios espera.

El evangelio de Jesús no se nos fue dado para dividirnos en credos…
El evangelio de Jesús no se nos fue dado para sacarle dinero…
El evangelio de Jesús no se nos fue dado para vanidades…

El evangelio de Jesús no es engrandecerme y sentirme grande o superior en mí supuesta sabiduría, estropeada al emplearla como hombre, de manera egoísta, vanidosa e hipócrita.

El evangelio de Jesús no es gastar salivas, una onza de acción hace más que toneladas de plegarias y sermones; sin oración verdadera o sin mover un dedo para cambiar las cosas.

El evangelio de Jesús es tener la fe que tubo Abrahán, sin la hipocresía, la vanidad y el interés demostrados por Giezi, quien recibió de inmediato, la paga a su mal proceder.

Todo el mundo, su plata, su oro, sus riquezas materiales pasaran pero el amor nunca.

Aprendamos de una buena ves la lección; y despertemos la fe, la justicia, la misericordia y el verdadero amor enseñados por Jesús, quien mandándonos nos pide diciendo:

Un mandamiento nuevo os doy:
Que os améis unos a otros…
¡COMO YO OS HE AMADO!
Que también os améis unos a otros.

En esto conocerán todos que sois mis discípulos…
Si tuviereis amor los unos con los otros.
‘Juan 13:34-35’

Basta de tanta hipocresía, envidias, vanidades, egoísmo y todo lo anticristiano…

Despertemos al amor de Jesús…
Pensemos más, en que podemos servir a los demás.
Respetemos las opiniones y doctrinas ajenas, dando de lo que podamos haber recibido por la gracia y el amor que es Dios, si edifica y muestra el camino correcto, a quienes quizás aún no han entendido, o han sido guiados a ciegas.

Cuidemos pues de TODOS los mandamientos…
Hagamos pues como Jesús nos pidió.

Seguimos creciendo en la sabiduría de Dios…
Obremos tal nuestro aprendizaje y conocimientos.

¡Ya tienes el llamado!

- • -

Aparta la mirada de la mentira de este mundo y despierta de tu pereza espiritual. Dios quiere salvarte y darte una vida nueva y verdadera, para que todos los que escuchemos creamos y hagamos su voluntad, caminemos juntos a Él y que podamos ser otra vez, en el nuevo comienzo que se avecina.

Que todo el amor de Dios y su sabiduría llenen tu vida, mostrándote el camino correcto, haciéndote humilde y benévolo para con los demás.
-Edward Libre-

Que el amor de Dios y su paz sigan bendiciéndonos a todos y confortando nuestro espíritu, en el nombre de Jesús.

Amén.

No hay comentarios.:

Publicar un comentario